martes, 21 de marzo de 2017

Educar, una obra maestra

"Los niños nacen sin entender como funcionan las cosas, para ellos todo es posible, por eso son tan creativos, porque no dan nada por supuesto, lo ven todo como un gran milagro". (Catherine L'Ecuyer)

Me gustaría presentaros a Catherine L'Ecuyer, educadora de Educación Infantil, dedicada en cuerpo y alma a su trabajo y autora del libro 'Educar en el asombro'. 

En los últimos años se ha llevado a cabo un enorme debate sobre el tema de los deberes en el colegio, vistos como una carga que impide que los niños puedan desarrollar otro tipo de actividades, disfrutar del tiempo libre y de los juegos, o pasar más tiempo con su familia. Son niños, y no adultos. ¿Acaso no es suficiente pasar 5 horas diarias en el colegio? ¿No aprenden más interaccionando con el resto de compañeros que haciendo 30 ejercicios similares a los que se han hecho en clase? Desde mi punto de vista, los deberes crean desmotivación, trastornos psicológicos y ansiedad en muchos de los alumnos, y lo digo con criterio, ya que he sido maestra en una academia de repaso donde el 90% iba única y exclusivamente a hacer los deberes con ayuda, ya que los padres o bien no tenían los conocimientos necesarios, o bien, no tenían tiempo.

¿En qué estamos convirtiendo la educación? ¿Dónde ha quedado la bonita infancia? Un estudio demuestra que los niños españoles son los que más tiempo dedican a los deberes, sin embargo, su rendimiento escolar está entre los más bajos de la OCDE, siendo el número de fracasos escolares de los más altos.


 
De acuerdo con este tema, Catherine afirma que los niños tienen muchos deberes y deberían jugar más, pues en el aburrimiento es donde se encuentra la chispa de la creatividad. Mirando atrás, y adentrándome en mi infancia, recuerdo que aprendía más matemáticas cuando jugaba con mis primos a "tenderos y clientes" que haciendo deberes de matemáticas... a la vez de ser divertido, aprendíamos más valores que con una simple suma en papel. No cabe duda de que en nuestro país se estudia y se trabaja demasiado, pero con una mal entendida cultura del esfuerzo. Es por todo esto que considero que hay que estudiar menos conocimientos no tan útiles y pensar más, brillar más.

A continuación, comparto con vosotros la excelente ponencia de Catherine L'Ecuyer en el Congreso de mentes brillantes del año 2016.



Como actividad propongo que se reflexione sobre el tema y se piense en dos situaciones:

  • Una situación donde el niño se ha visto saturado con los deberes.
  • Una situación donde el niño ha creado algo brillante dejándose llevar por su imaginación.


"EL UNIVERSO DEL NIÑO ES UN PUZZLE DESORGANIZADO...DESDE EL QUE TODO ES POSIBLE"





No hay comentarios:

Publicar un comentario